Las cuotas han variado y es momento de ir con Janowicz. Confío en el polaco, un jugador de los que crece exponencialmente según aumenta la velocidad de la pista en la que juega. Jerzy ha hecho un año muy bueno, aún le queda mucho margen de mejora y en esta superficie para mí ya es mejor jugador que el brasileño.
Bellucci es un tenista extraño, prometía mucho en sus inicios y se ha estancado hasta el punto de que parece incluso haber empeorado con respecto al que era hace años. Bueno en tierra, varió diversas rutinas de entrenamiento para tratar de ser competitivo en cemento y ello, lejos de valerle para ser más competitivo en dura, le ha hecho ser peor sobre polvo de ladrillo sin mejorar lo más mínimo lejos de la arcilla. Ha pasado más de un cambio de enrenador y de grupos de entrenamiento y no termina nadie de dar con la tecla necesaria.
Los números del brasileño sobre dura son para echarse a llorar, con apenas un registro de 5-8, y si analizamos sus victorias una fue por retirada y las otras cuatro a principios de año ante Rosol, Melzer, Sela y Machado, encuentros totalmente ganables. Ha sido derrotado por gente como Andújar, Falla o Gil que no deberían haberle hecho sufrir. Aquí en Moscú ganó ayer a un terrícola como Cipolla, en una victoria que no me dice nada porque entra dentro de lo lógico.
Janowicz por su parte ya lleva dos victorias aquí sin ceder un set, con buenos números al saque y aunque no llega en su mejor forma, la cual vivió durante la primera mitad del año, creo que tiene más recursos para adaptarse al juego de rápida y por tanto más posibilidades que Thomaz.