5-7 2-6
Pronóstico: Jamie Hampton 2-0 Casa de apuestas: Cuota: 2.25 Stake: 4 Ahora sí que sí, decididísimo a empacharme comiéndome picks rojos pero es que no puedo aguantarme. Repito la historia de esta mañana con el Pfizenmaier - Radwanska en el encuentro entre Anna Karolina Schmiedlova (18 años, 150 WTA) y Jamie Hampton (23 años, 24 WTA). Volvemos a ver un encuentro con cuotas que sobrevaloran a una jugadora que no ha empatado con nadie, y yo entonces vuelvo a irme a favor de la victoria cómoda de Hampton en este caso, una tenista mucho más experta, consolidada y a la que le daría la risa jugando los torneos que juega la eslovaca. Schmiedlova, en el puesto más alto de su carrera tras ganar el ITF $25.000 de Civitavecchia y alcanzar los octavos de final en el WTA de Katowice, para mí no es nadie. La vi jugar cuando ganó a Cornet, y le dio un repaso pero es que la francesa sigue siendo una tenista que nunca saber por dónde te va a salir y una de tantas a las que cualquier le puede pintar la cara en un día suelto. Más allá de eso, y de que atraviesa un momento excepcional de forma, no la veo como jugadora llamada a nada. Pasó la previa arrasando a Cohen, Nara y Kudryavtseva, pero me llama la atención que cedió cuatro juegos al saque en sus dos últimos duelos de la qualy, pese a ganar ambos encuentros por 2-0. Ya en el cuadro final venció hoy mismo a Wickmayer 7-6, 2-6 y 6-3, aprovechándose del aún lamentable estado físico de la belga, a la que el hombro sigue destrozando -8 dobles faltas-. También volvió a servir con dudas, cediendo algún saque menos de loes esperados -4 en 14 juegos- pero no siendo muy superior a una Wickmayer que hizo el mismo número de puntos que ella, pero tuvo peor fortuna en los momentos calientes. En un partido tan largo Schmiedlova apenas hizo 17 winners, basándose su victoria en el desatino de su rival, que cometió la barbaridad de 66 no forzados por solo 34 winners, muestra inequívoca de que pese a su mal estado físico fue quien llevó la batuta y que ella sola perdió el encuentro, porque fue dominadora del sentido de los intercambios. Además, Schmiedlova estuvo errática con la derecha -26 errores por solo 18 de revés- lo que me da a entender que no es una jugadora capaz de mandar. Mañana se las verá con Jamie Hampton, que en tierra no es manca. He dicho muchas veces que en WTA la diferencia de superficies es menos notoria que en el circuito de los hombres, y Hampton no es de las pocas que se vuelve idiota en polvo de ladrillo. Viene de caer en semis de Bruselas ante una Kanepi en una genial forma. Quizás no sea de las más potentes del circuito, pero le da de sobra -creo...- para ganar 2-0 a una tenista, como digo, inferior y no preparada para estas lides. Hampton ha ganado hoy mismo a Safarova, mucho mejor contrincante, en tres largos sets. Ha sido algo más ofensiva que la checa, y si mañana repite guión tiene muchas papeletas para llevarse el partido. No me asusta el cansancio porque está más que habituada a la exigencia física del circuito, y si se da lo que pienso dominará el partido, en cuanto a que será la que arriesgue. Tiene toda la pinta de que el encuentro lo llevará por donde quiera, y si está acertada y encuentra los winners pienso que Schmiedlova no tiene con qué pararla más que pasando y pasando bolas. A ver si no se le cruza el cable...
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