Enviado: 20 de Septiembre de 2008, 13:54
La penúltima etapa de la Vuelta presenta una cronoescalada entre La Granja de San Ildefonso y el alto de Navacerrada, una subida que obligará a todos los ciclistas a un último y definitivo esfuerzo a lo largo de 17,1 kilómetros de agonía para todos los que estén pelando por un peldaño en el podio de Madrid.
El alto se asciende en esta ocasión por la vertiente segoviana e incluye tres zonas muy marcadas: los dos primeros kilómetros son llanos, los ocho siguientes kilómetros no son tampoco de un gran porcentaje, pero ya tienen tendencia a subir y el puerto propiamente dicho que se afronta en los últimos 7 kilómetros de la cronoescalada decisiva en la Vuelta’08.
Antecedentes: La Granja de San Ildefonso nunca había acogido un final de etapa, aunque sí tiene un fuerte vínculo con la Vuelta puesto que el trofeo de vencedor es realizado en la Real Fábrica de Cristales. Navacerrada sí ha vivido una llegada. Fue en 1998 y con triunfo de Andrei Zintchenko.